jueves, 21 de enero de 2010

Conferencia en el Campus del Varri Vell (UdG)

El sábado, en nuestra Facultad, hay una conferencia sobre el libro hi ha una "El Islam sin velo", de Nazanín Amirian. Para más información: http://www.nazaninamirian.es De todos modos, escribo parte de la contraportada del libro para todxs aquellxs que esteis interesadxs! Nos vemos el sábado! " Un árabe puede no ser musulmán, un musulmán no árabe y, sin embargo, todos parecen ser lo mismo; ni siquiera los de la misma área geográfica practican la religión del mismo modo. ¿Qué significa choque o alianza de civilizaciones? En el mundo existen ocho civilizaciones: la hindú, la budista, la confuciana, la musulmana, la africana, la latinoamericana, la ortodoxa y la occidental, confundiendo lugares geográficos con las religiones... Éstas y otras muchas otras cuestiones son las que intenta contestar este libro que, lejos de ser religioso, ofrece explicaciones políticas, antropológicas, económicas, sociales y también religiosas a algunas preguntas que surgen en Occidente sobre los modos de vida, ritos y costumbres de los creyentes de esta fe, desde las normas para amar, las relaciones sexuales, pasando por el martirio, el sufismo, o el velo, entre otros temas, desvelando hasta qué punto estos asuntos están sembrados de prejuicios. Así, en estas páginas, la presunta «unidad» del mundo musulmán se deshace ante la diversidad de sus integrantes que, para empezar, ni tan siquiera se reconocen como parte de esta denominación. Avalado por el rigor de los datos que se disfrazan con un lenguaje didáctico, sencillo y ameno, El islam sin velo supone el primer libro escrito en nuestro país que trata las cuestiones a las que se enfrenta Occidente respecto al islam desde un punto de vista laico, crítico, serio y respetuoso, y pone al descubierto sorprendentes aspectos cuyas dimensiones resultan inconcebilbes incluso para aquellos que lo opusieron contra el "Occidente cristiano". "Una interesantísima guía para bucear en el mundo islámico, resolver dudas, eliminar prejuicios y corroborar conceptos. Se trata del primer libro escrito en nuestro país que trata las cuestiones a las que se enfrenta Occidente respecto al Islam desde un punto de vista laico, crítico, serio, respetuoso, antropológico y sociológico. El libro está muy bien escrito, no hay un ápice de pedantería ni se simplifican los temas. El tono del libro es adecuado, el tratamiento es muy correcto y se dan ejemplos concretos de todos los temas que se trata por lo que la ejemplificación es muy pertinente y no se pierde la visión de conjunto"

sábado, 16 de enero de 2010

"El Color del Paraíso"

Esta es la historia de Mohammed, un niño inteligente, curioso, imaginativo, extrovertido, con gran capacidad de abstracción, generoso y de una fuerte sensibilidad, que tiene ceguera total congénita y ha desarrollado casi de manera mística los demás sentidos, especialmente el tacto y la vista. No percibe ningún tipo de estímulo visual, sin poder distinguir la intensidad de la luz, por lo que no puede saber si quiera si es de día o de noche. Recomiendo esta película del director iraní Majid Majidi, tanto por su gran sensibilidad y sencillez como por los diferentes aspectos que trata, interesantes de analizar como psicólogxs: la relación paterno-filial, el grado de aceptación de la disfunción visual (tanto desde el punto de vista social, como personal y familiar) así como sus síntomas más relevantes, cómo Mohammed se relaciona con el resto de niños, cuales son sus penas e inseguridades relacionadas con su disfunción, o las características de un tipo de institución educativa contemplada únicamente para este colectivo. Para aquellxs que no la hayáis visto aún, os animo a ello! Espero que os guste!

viernes, 15 de enero de 2010

miércoles, 13 de enero de 2010

La Amnesia Anterógrada (o pérdida de memoria a corto plazo)

La amnesia anterógrada es un tipo de amnesia (pèrdida de memoria) en la que los nuevos acontecimientos no se almacenan en la memoria a largo plazo, de manera que la persona afectada no es capaz de recordar algo si deja de prestarle atención unos segundos. Aunque muchxs la conocemos como "pérdida de memoria a corto plazo", técnicamente se usa el término amnesia anterógrada, ya que el problema no está en la memoria inmediata sino en los recuerdos a largo plazo. Puede afectar de manera diferente a los distintos tipos de memoria (nuevos movimientos, palabras, sucesos del día, o hechos históricos, por ejemplo). Algunxs que la padecen pueden aprender y recordar algún movimiento (como tocar una nueva canción) y luego no acordarse de cuándo lo han aprendido. Hay casos en que la persona podía aprender y recordar nuevas palabras o acontecimientos (memoria semántica) pero no podía recordar sucesos del día anterior (memoria episódica).

Memento (2000), de Christopher Nolan

En esta película, Memento, podemos ver este tipo de amnesia que sufre el protagonista. Por si alguien no la ha visto, aquí podeis verla online: http://www.divxonline.info/pelicula-divx/121/Memento-2000/ De todos modos, cuelgo un fragmento de la peli que explica bastante bien esta disfunción de la memoria, para hacernos una idea.

sábado, 12 de diciembre de 2009

Miedo a sentir lo que está condenado

No ser dueñx de unx mismx es de las sensaciones más terribles que puede experimentar un ser humano, sobretodo cuando es consciente de ello. Es vivir en una constante lucha contra unx mismx, vivir el miedo, el pavor, el dolor, conocerlo de cerca, en tus propias entrañas, acostarte con él cada noche y despertar junto a él todos los días.
Nadie mejor que las personas que vivencian episodios psicóticos conoce esta "realidad"; y digo -por paradójico que pueda resultar - realidad porque no hay nada más real que lo que unx vive en su propio ser, lo que a unx le agita el alma, sea de la naturaleza que sea... Por lo que, más allá de especular sobre la etiología de los trastornos de lo que algunxs han denominado "espectro esquizotípico", puesto que filósofxs, teóricxs y científicxs en la materia hay más que de sobras y considero que es un tema que merece ser tratado no sólo con conocimiento de causa sino con gran tacto, respeto y ternura (porque la sociedad y el lenguaje ya se encargan de estigmatizarlo suficiente), mi intención en este post es limitarme a compartir algunas fuentes de información que tratan el tema desde diferentes enfoques y perspectivas, y que personalmente me sirvieron para tener más dudas aún sobre este gran desconocido que es la esquizofrenia.

martes, 8 de diciembre de 2009

Algunas reflexiones sobre la Autoestima

Hoy día, en cualquier librería podemos comprar la autoestima en formato papel. De entre los miles de libros dedicados a este tema, podemos encontrar títulos muy variopintos. Ahora sabemos que en menos de 200 páginas podemos ser mejores y querernos más. Podemos introducirnos en el mundo del éxito, ser aceptados. Incluso padres y madres encontrarán por menos de 15 euros "guías indispensables" que les ayudarán a hacer de sus hijos personas contentas y seguras. Las claves del éxito están a la vuelta de la esquina y la desesperación hace negocio. Es como el "aprenda a tocar la guitarra en 15 días" o el "aprenderá a hablar inglés en tan sólo 1 mes". Siempre la ley del mínimo esfuerzo, parcheando incluso temas que merecen especial dedicación, tacto y respeto como es, en este caso, la voluntad de las personas por superarse.
El otro día vi uno que se titulaba "Eres Genial Como Eres / Hija: 100 Consejos Para Que Tu Hija Desarrolle Su Autoestima", que no he leido ni leeré pero me generó un mal cuerpo que he decidido tomar su título como ejemplo para dar mi opinión no tanto sobre el concepto de autoestima en sí, sino sobre cómo está introducido socialmente. Este libro, que parece casi un recetario de cocina, también lo encontramos con la variante "Hijo" porque - para quien pueda sorprenderle - parece que tener pito requiere de pautas distintas para "desarrollar la autoestima". Además, el título implica un modelo de educación basado en fortalecer el "ego" mediante alabanzas, probablemente incluso en situaciones no tan loables.Desde mi punto de vista - criticable y tantas veces criticado - libros así tendrían que estar bajo prescripción médica y no "a l'abast de tothom", advirtiendo, por supuesto, sobre los posibles efectos adversos que pueda provocar su (mala) suministración.
La mediocridad no se tiene que alabar, ni la pedagogía tiene que sustentarse sobre este criterio. Una cosa es animar y fomentar la autoestima positiva educando en "inteligencia emocional", por ejemplo, y otra muy peligrosa es crear jóvenes-personas vulnerables que, alimentadas de imprudentes magnificaciones, acabarán desarrollando una intolerancia a cualquier tipo de crítica, aunque sea constructiva.
Si se dice a los niños constantemente que todo lo que hacen es magnífico, luego, cuando se intenta sugerirles algo para que mejoren, se lo toman como una crítica y se resienten. Todo comentario que no sea de alabanza se considera una crítica negativa, lo que se convierte en un verdadero obstáculo para aprender.
De peques, nos formamos imagenes de nosotrxs mismxs basadas en la forma en que nos tratan las personas allegadas que nos son significativas, como nuestros padres y/o madres, ya que no tenemos tantos referentes como a medida que nuestras relaciones se van ampliando. Pero si esta imagen/valoración no es realista (y suele pasar porque los comentarios de las madres, más quizá que el de los padres, respecto a sus hijos, están llenos de carga afectiva), no es muy difícil comerse la realidad de canto. Pues luego somos capaces de valorarnos y valorar según nuestros propios criterios y es cuando viene el choque.

Todos y todas tenemos autoestima. Esta puede ser alta o baja, o incluso por ciertos factores, una persona puede tener cierta tendencia a un nivel u otro de autoestima. El problema viene con autoestimas sobredimensionadas o infradimensionadas, pero creo que siempre fluctúa: nuestra autoestima, por mucha integridad personal o autoaceptación que tengamos, es susceptible a ciertas situaciones o variables externas. Porque no hay que confundir el autoconcepto con la autoestima, que podría ser la sensación que unx tiene de, por ejemplo, ser rechazadx o aprobadx por los demás.

En todo caso, creo que la autoestima debe ser adecuada, sin más. El afecto, la comunicación, el respeto mútuo o la responsabilidad, son valores que hay que promover y potenciar previamente, antes de dar pócimas mágicas sobre la autoestima, porque justo son los valores los que la sustentan.

Ya para acabar, creo fundamental que una persona tenga claras sus posibilidades y sus limitaciones (es decir, que sea consecuente y consciente de su contexto y de los recursos de los que dispone) y marque entonces sus objetivos que, creo, la consecución de estos serán los que más influirán sobre su nivel de autoestima, porque ésta debe basarse en logros reales, en el esfuerzo.

Y la autoestima no se enseña, ni se aprende, ni se compra, ni te la dan a modo de suvenir una noche de lujuria y pasión. La autoestima hay que ganársela, currársela, en un proceso constante, día a día, siendo conscientes de que nos desarrollamos en un contexto social que tiene sus valoraciones y prejuicios sobre las personas y grupos que lo tejen, como por ejemplo, sobre el indigente, el negro o la mutilada. En una sociedad donde las relaciones no se basen en valores consistentes, honrados, participativos y democráticos que valoren a las personas por sus cualidades y acciones, al final libros como estos nos los regalarán hasta con el champú.

Quien es auténtico, asume la responsabilidad por ser lo que es y se reconoce libre de ser lo que es

martes, 17 de noviembre de 2009

La histeria: una muestra más de los efectos de la dominación masculina en el campo de la Psicología

Bueno, estos días no sólo he estado terriblemente enganchada al libro de Theodore Millon "Trastornos de la personalidad en la vida moderna" que, por cierto, voy a tener que idear cómo apropiarme de él de manera indebida y sin la autorización de su vendedor, puesto que vale 110'20€ (para que luego digan que no hay censura, y encima en la cultura: la censura de los precios!). Lo recomiendo, aunque cabe decir que en estos días, mientras lo leía y releía, me ha dado la sensación de que tenía todos los trastornos habidos y por haber. ¿No os pasa? Lees algo y dices: ostras, esto lo tengo yo! Otra cosa..: esto lo tengo yo! Qué ansias por encajar en todo cuadro clínico! En fin, al final, creo que lo que tengo es un trastorno histriónico de la personalidad, concretamente el estilo expansivo, ¡y de manual!
Monjas, Vibradores, Orgasmos e Histeria
Etimológicamente, histeria vienel griego hystera, que significa útero. La histeria ha pasado por siglos de historia y ha sido atribuída esencialmente a mujeres, disgnosticándose a menudo en vírgenes, monjas y viudas. ¿La terapia? El coito si estaba casada, el matrimonio si estaba soltera y el masaje pélvico o de clítoris para las monjas devotas hasta alcanzar el orgasmo, que sería lo que para Freud "hacer consciente lo subconsciente".
Y ahora copio del Wikipedia, porque no tiene desperdicio:
Durante la década de 1890, época en que hubo una epidemia de histeria,los médicos creyeron encontrar el medio efectivo para calmar la enfermedad: el uso de vibradores y consoladores; desde antiguo se conocía el mal suponiendo que todo partía de lo que los griegos llamaron útero ardiente debido a la ansiedad de las mujeres, su estado de irritabilidad, las fantasías sexuales y, sobre todo, una excesiva lubricación vaginal. Lo achacaban al estado de frustración en que se encontraban.Al ser una enfermedad, las mujeres acudían periódicamente a recibir tratamiento médico, dándose así por aceptada la práctica y encontrando en muchas ocasiones en la consulta lo que no conseguían en su casa. Aquí hay más!!http://es.wikipedia.org/wiki/Histeria_femenina
En realidad esta éxplicación- si la entendemos dentro de su contexto - es bastante genial a mi modo de ver, puesto que sería un anticipo a lo que más tarde vendría a ser el efecto hormonal. Sabían que "algo pasaba ahí"....!
Teoría del "útero viajero"
Voy a copiar literalmente un texto que sale en el libro de Millon que me ha parecido muy curioso e interesante, para compartirlo con vosotrxs!! Es el siguiente:
Los orígenes de Ia histeria se encuentran profundamente arraigados en laa historia de naturaleza humana. Tal como ya saben todas las mujeres y la mayoría de los hombres, estos no entienden a las mujeres. Pero además, los hombres no pueden entender por qué no entienden a las mujeres. En vez de seguir intentándolo, han creado síndromes diagnósticos que contienen aspectos de la conducta femenina que para ellos son especialmente sorprendentes.
Como la historia de la humanidad ha estado dominada desde siempre por los hombres, quizá no deba sorprendemos que la histeria fuese uno de los primeros trastornos mentales descritos. Para los antiguos griegos, la histeria estaba causada por un útero viajero y aberrante que podía soltarse, viajar por el cuerpo y llegar al cerebro, produciendo excesos comportamentales que, como es natural, la mayor parte de los hombres temían, tales como el descontrol emocional y la lujuria femenina.
Así pues, la histeria recogía la creencia masculina de que todas las mujeres están locas o, por lo menos, que constituyen casos subclínicos que con facilidad se exacerban con algún comentario o mirada no intencionada.
Finalmente, la gloria de las antiguas civilizaciones de Roma y Grecia desapareció. En la Edad Media el mundo se entendía a través del paradigma religioso. La fe en Dios compensaba los malos tiempos por los que pasaba la humanidad, incluyendo el hambre, la enfermedad, las epidemias de peste y la guerra. Para hacernos una idea, una tercera parte de la población de Europa fue aniquilada por la peste negra. Las personas buscaron explicaciones para estas calamidades. ¿Cómo podían producirse estas catástrofes si Dios era justo y amoroso? Una vez más, las mujeres tenían la culpa. Todas las que vivían al margen de las normas sociales se convertían de inmediato en cabezas de turco y se las “diagnosticaba”, según la moda de la época, como brujas confabuladas con el diablo. Mediante la brujería estos seres diabólicos podían invocar a las fuerzas responsables de las plagas, la mala suerte y, lo peor de todo, de la impotencia. Al final la expansión de esta creencia en las brujas encontró respaldo religioso en el Malleus Maleficarum o Martillo de las brujas, escrito por dos monjes alemanes en 1496, una especie de versión a lo Stephen King de nuestro moderno DSM completado con su propia forma de terapia: la hoguera.
Aunque la caza de brujas finalmente cesó, parece ser que cada época desvela algún síndrome nuevo que sólo afecta a las mujeres. Nuestro contemporáneo trastorno disfórico premenstrual puede constituir el paralelismo moderno, la idea de que los ciclos femeninos causan problemas psicológicos. Aunque muchas podrían admitir cambios emocionales y conductuales relacionados con su periodo menstrual, las mujeres pueden defender también que estos cambios ocupan sólo unos pocos días al mes, mientras que un pene altera la conducta de los hombres la mayor parte del tiempo. Resulta curioso que la historia no recoja en ningún momento la existencia de un pene viajero aberrante que pudiera desprenderse, alojarse en el cerebro y distorsionar la percepción para explicar de este modo la conducta antisocial entre los hombres.
La Histeria según Freud

Desde una perspectiva psicodinámica, la neurosis es entendida como resultado de una histeria de conversión donde los estados de intensa excitación emocional se somatizan, se manifiestan mediante síntomas físicos debido al uso recurrente de la represión como mecanismo de defensa. La solución sería pues, devolver el recuerdo (trauma infantil sexual) a la conciencia mediante la hipnosis, método con el que se generaba un estado de catarsis, de descarga emocional, que permitía recordar los acontecimientos excluidos activamente de la conciencia y que, según Charcot, servía para comprender pero no para curar.

En 1980, en el DSM III se describe por primera vez la personalidad histriónica, que pasa a sustituir la antigua y sexista personalidad histérica psicoanalista. Y aunque el término "histeria" se usa todavía, no es reconocido oficialmente.